
Gregory Bateson, estudioso de este tema, establece su «teoría del doble vínculo» en que sugiere que la psique de un niño se escinde (o esquiza) cuando recibe mensajes contradictorios de su familia (por ejemplo de su madre) y funciona así:
Existen por lo menos, dos partes, la víctima y el victimario
o La víctima tiene un vínculo intenso y vital con el victimario para su supervivencia
o El victimario tiene poder para aplicar castigos a la víctima
o El victimario envía mensajes contradictorios que ponen en una trampa a la víctima; ésta recibe:
♣ Una orden primaria bajo amenaza de castigo y
♣ Una orden secundaria, contradictoria con la orden primaria, también bajo amenaza de castigo
o Las contradicciones no pueden ser discutidas ni indagadas, bajo amenaza de castigo o La indiscutibilidad debe ser disimulada, también bajo amenaza de castigo
o La víctima no puede escapar del vínculo que la liga al victimario
Así una madre puede decir a su hijo «M’ijito, hace mucho que no me das un abrazo y un beso», cuando el niño lo hace, entonces, la madre lo retira bruscamente diciendo «Pero no exageres, no necesito tus cariños»; el niño queda confundido sin saber qué hacer en el futuro.
Chris Argyris aplica esto en la organización; dice que existen rutinas defensivas organizacionales que evitan que las personas se sientan expuestos a la vergüenza.
Así, en una relación jefe – colaborador funciona así:
Hay por lo menos dos partes, la autoridad y el subordinado
o El subordinado cree que depende de la autoridad para su bienestar o La autoridad tiene el poder de aplicar castigos (disminuir el bienestar) al subordinado
o La autoridad envía mensajes contradictorios que ponen al subordinado en un dilema
♣ Cumplir con una orden primaria respaldada por una amenaza de castigo
♣ Cumplir con una orden secundaria, contradictoria con la orden primaria, también respaldada por una amenaza de castigo
o La autoridad no permite que las contradicciones existentes en sus mensajes sean discutidas o cuestionadas, bajo amenaza de castigo
o La autoridad no permite que esa indiscutibilidad sea discutida o cuestionada, bajo amenaza de castigo
o El subordinado juzga que no puede escapar de la autoridad sin perder su bienestar
Un supervisor podría decir a un operador «Si ves una pieza defectuosa en la línea de producción y no detienes la máquina te despido» y al día siguiente le dice «Si tenemos una orden urgente y detienes la máquina te despido»; el operador pensará «¿Qué voy a hacer si veo una pieza defectuosa en una orden urgente? Si la detengo me despedirán y si no, también».
Esto también puede pasar de colaborador a jefe.
Desarmar las rutinas defensivas, tiene que ver con poder discutirlas. Hablar sobre cómo hablamos (meta comunicación). Esto requiere un ambiente emocionalmente seguro.
Somos seres complejos y lo único que resuelve nuestros problemas de interacción son las buenas conversaciones.
Abrazo.
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